domingo, 17 de julio de 2011

Entre dos aguas

Todos los que viven fuera de sus lugares de origen entenderán perfectamente esto.
Mañana me voy para Sevilla para ver a la familia y amigos, compartir unos días con ellos y hacer un viaje juntos.
Para los que vivimos entre dos aguas, hay una cosa que siempre nos sucede, mañana cuando pasee por el barrio donde me crié, me encontraré con cualquiera de mis amigos que siguen viviendo allí, el inicio de la conversación será este:
- ¡Quillo canario!, ¡estás más tiempo aquí que allí!, ¿qué pasa? ¿cómo estás?
- Bien tio, muy bien, pero ya hacía unos meses que no venía.
- Cucha, ¿una cervecita?
- Venga
Llegamos al bar de Juan....
Y Juan, ¡canario!, otra vez por aquí, ¿qué va ser?
- Ponle una cruzcampo pa´que vaya recuperando el acento, que viene canario perdio.
- ¡Juan! pon un plato de jamón, cortao finito, pa´ligerar el proceso del acento.

Pero es que cuando vuelvo a Las Palmas, es justo lo mismo pero al contrario.
- ¡Chacho sevillano! ¿qué pasó?, no pierdes el cloquio, ¿una tropi?
- Venga 

Estamos llenos de tópicos, pero bueno es divertido tambíen.

Decidí adelantar el inicio del programa de entreno que os mostré en la entrada anterior, al día de hoy, por eso de que mañana avión y después lo típico eso de saludar y correr el riesgo de quedar enganchado en alguna barra.
Comentar sobre el plan que puse que el mismo, es personalizado, previamente a su diseño, me hice una analítica, un test de campo y una prueba de esfuerzo, estableciendo mi VO2, mi frecuencia máx y mínima y algunos valores más.
El plan fué hecho por una entrenadora licenciada de INEF, Cristina Rivero,  para una Ultra de 83 km, la Transvulcania.
Naturalmente fué hecho bajo aquellos valores, y en ese momento si podía iniciar un plan a esos tiempos, y se terminaba por debajo de 4' en las últimas semanas. Por ejemplo  los días de calidad, las series de 1000, 2000 y 3000 m, iban de 3'35'' a 3'45''.
El otro día cuando lo publiqué no modifiqué estos valores porque realmente no sabía en que punto me encuentro, hoy, ya lo sé.
Este ha sido el resultado de mi entreno de hoy:

Resultados

Producto
Polar RS300X
Distancia
km
Duración
hh:mm:ss
Calorías
kcal
Frecuencia cardíaca media
ppm
Frecuencia cardíaca máx
ppm
Velocidad media
km/h
Velocidad máx
km/h
Ritmo medio
min/km
Ritmo máx
min/km

El ritmo medio se me fué a 4'42'', son 12'' más, pero estoy muy satisfecho, además después de la paliza de ayer, 4 horas de bici de montaña, con mucho viento al inicio y con calor al final, con un perfil  en constante subida salvo el último tramo de bajada salvaje a donde me fueron a recoger.

Siguiendo con lo del plan, cierto es que en una prueba de esta no vas nunca a esos ritmos, pero si es bueno no dejar de lado la calidad para no volvernos excesivamente lentos, además dinamizamos y optimizamos el rendimiento mejorando nuestra capacidad cardiovascular.
Eso sí por ejemplo los días de tirada larga, la hacemos al ritmo medio o un poquito por encima de lo que lo haremos en competición, interesa muy mucho hacer entrenos, ya no, largos en kilómetros si no en tiempo, entrenamos al cuerpo a estar muchas horas sometidos a un esfuerzo, aprendemos a nutrirnos, a descansar, a entrenar los cambios de ritmos,....y además, el aspecto mental también lo fortalecemos en estas tiradas.

Hoy, estoy supercontento, las cosas marchan...



viernes, 15 de julio de 2011

Comienza la cuenta atrás



Me voy encontrando más fino, las piernas pesan menos, el paso se aligera, la respiración se acompasa y el corazón recupera antes.
A partir de la semana que viene comienzo el plan de entrenamiento para la UTGC, siempre para intentar conseguir un objetivo hay que tener un plan, ya sea mejor o peor, seguir una pauta es fundamental tanto para el cuerpo como para la mente.
Este que inicio es el plan que tuve para una carrera de 90 km con mucho desnivel, lo he adaptado a esta prueba añadiendo km en las tiradas largas, que me ayuden a ganar resistencia.





L

-  Calentamiento: 10´de CC y estiramientos.
- CC 45´a 4´30/km. Estiramientos, abdominales (200) y lumbares (100).


        M

- CC 20´, estiramientos 2-3´.
-  Escaleras: 2 repeticiones. 
- Para terminar, trote sueve 10´ para descargar, estiramientos, abdominales (200)y lumbares (100).

        X

- CC 15´, estiramientos y cuestas: 8 x200m, tras subir cada cuesta, bajas recuperando y haces un llano de 100m a 18´´aprox, recuperas en la vuelta del llano y empiezas de nuevo la cuesta.
Al terminar las cuestas, trote de 15´en llano a 130p/m. Estiramientos.
-.


J

-. DESCANSO.


V

- CC 15´y estiramientos2-3´.
- Fartlek: 2 x 8 x 30´´, es decir, 2 bloques de 8 repeticiones de 30´´lentos (a 125 p/m) alternados con 30´´ rápidos (157 p/m), recuperas 3´de trote a 120 p/m y vuelves con las 8 repeticiones de 30´´ rápidos-30´´lentos. Seguidamente trote continuo de 15´a 125 p/m. Estiramientos, abdominales (250) y lumbares (150).


S

- CC 10´para calentar, movilidad articular  y estiramientos.
- Salida por montaña de 20 km aprox.
- Estiramientos.


D

- DESCANSO






























Hoy comienzo mis vacaciones con lo cual, los entrenos de esta primera semana van a ser muy variados en cuanto a los lugares por los que correré, ahora mismo, ni yo lo sé.

Es ilusionante marcarte un objetivo, pero desde luego se hace mucho más real desde el momento que te pones a trabajar para él.

¡A disfrutar!

jueves, 14 de julio de 2011

Mi Camino de Santiago (parte III)

En esta segunda etapa mi objetivo era Sarria, 44 km, hizo un poco menos de calor, 35º, aunque mejor que el día anterior no era lo ideal, bebí mucho también.
Yo hacía dos etapas diarias, la primera me la pasaba muy acompañado, porque estaban todos los que habían pasado noche en los distintos albergues del Camino, cuando cubrían etapa ya se quedaban, y yo comenzaba mi ruta en solitario, solo al final iba cogiendo a aquellos que se habían ido rezagando.
Si bien en la primera parte iba saludando a unos y a otros y charlando, en la segunda era pura soledad y reflexión, una gozada también.
Ya en Sarria, y una vez hecho los deberes, ducha, lavar y tender, y preparar la cama, tocaba visitar la farmacia, las ampollas que se me formaron el primer día, en este segundo se me habían desarrollado y formado dos más, me parecía increible, en dos días, 100 km, pero con siete ampollas entre los dos pies; pues nada compeed de dos tipos y que sea lo que Dios quiera.
Volví al albergue a dejar la bolsita de la farmacia y ahí me encontré por primera vez con Mari Carmen, la donostiarra de 64 años y su compañera de Alicante, (me olvidé de su nombre...grrrrr), me ofrecieron un plato de macarrones con atún que habían cocinado, pero yo decidí salir de nuevo a la calle. En Santiago supe que cuando comentaban algo de mi me llamaban "macarrones".
Y como me pasó el primer día, me senté solo a cenar y acabé acompañado, un matrimonio de Madrid, deportistas habituales y que este año, ¡por fin! estaban haciendo el camino, una velada agradable en un lugar estupendo.
Al día siguiente por la mañana, se notaba que había muchísima más gente a partir de este punto, es el lugar de inicio de muchos peregrinos porque desde aquí se cubre la distancia mínima para obtener "la compostela".













Amaneció con bruma y una ligera llovizna, nada que ver con los días anteriores.
En esta tercera etapa, apoyar mis pies era un sufrimiento, lo de correr, lo descarté totalmente en esta etapa, anduve mucho, mi destino fué Palas de Rey, casi 48 km., no estuvo mal.
El camino desde Sarria a Puertomarín me gustó muchísimo, encima la llovizna lo hizo como más recogido, y eso a pesar de que el camino estaba este día superpoblado.
Como siempre la segunda parte en soledad, he de decir que hubo un momento mágico, en medio de un bosque con el viento soplando, es increible, te paras, cierras los ojos, y solo escuchas el viento agitando las ramas, respiras hondo y te llenas de energía.
En este día hice una parada en Portomarín, sería la lluvia, pero arrastraba hambre y me pedí un bocata de chorizo, ese bocadillo me dejó boquiabierto, hacia la mitad estaba cubierto por una servilleta, toqué con cierto tacto la servilleta para comprobar si debajo había bocadillo, y había....ese bocadillo era el bocadillo más grande y gordo del mundo, le pedí que me lo partieran en cuatro trozos, daba vergüenza llevar eso de una pieza a la boca, pero....arrastraba hambre y no quedó una miga.
Cuando comencé a caminar de nuevo, a eso de la una de la tarde, ya no solo me dolían los pies, ahora también tenía sueño, el bocata hacía su efecto.
Me lo tomé con bastante calma y a eso de las 6 de la tarde llegué a Palas, la misma rutina de siempre, aquí conocí a un italiano simpatiquísimo, estuvimos charlando con mi poco italiano y su poco castellano.
El apetito es algo que aquí he recuperado, hoy volví a cenar un menú del peregrino, primer plato limpio, segundo plato (tres chuletas de pavo con patatas fritas caseras), plato limpio, se acerca el camarero y me dice "te pongo otro segundo igual y no te lo cobro, ¿quieres?, yo le dije "venga", salí de allí con el objetivo claro, me lavo los dientes y a la cama.
Por cierto era extraño acostarse a pleno sol.










Cuarta etapa, Palas de Rey - O Pedrouzo, 48 km + 4 km de propina porque me pasé O Pedrouzo y me puse ruta a Santiago, me dí cuenta y volví para atrás.
Cuando comencé la etapa, tuve dudas de si iba a terminarla, los pies los tenía ya muy mal, sin embargo fué una etapa en la que no paré de correr, a un ritmo muy tranquilo pero constante.
Me encontré con mi amigo italiano, un señor de unos 60 años, me hizo algunas fotos y yo a él también, iba en bici y estuvimos cruzándonos constantemente durante la primera parte de la etapa. La anécdota estuvo que al darle una tarjeta mía con la dirección de mail, vió mi segundo apellido Pinto, me enseño su DNI italiano, su apellido también era Pinto, total, le dije "abrázame primo", nos reimos.
Ya en O Pedrouzo, tuve el placer de encontrarme con un amigo de Las Palmas, Norber y su mujer, las casualidades son así; y justo después de cenar me volví a encontrar con Mari Carmen y su compañera, ahí fué donde cada una me contó su historia y acabamos con lágrimas en los ojos los tres.
Lo dije en mi primer capitulo de esta serie, las historias de ambas me llevaron por delante y serán siempre un ejemplo de tesón, entereza y rebelión contra todo aquello que suponga un imposible, porque como dicen los de Adidas "Imposible is nothing"
Y como el día no tenía y no podía terminar de una forma triste, ahí estaban la alegría de los valencianos y las catalanas, ellos me habían visto llegar y mi forma de caminar les delató que no estaba pasándolo nada bien, así que, me invitaron a sentarme con ellos y tomar una cerveza.
Un buen rato que prolongamos en Santiago al día siguiente.








La última noche, fué la más corta, en la que más tarde nos acostamos y en la que más temprano nos levantamos, a las 5 de la mañana en pie y a las seis y poco ya ibamos camino de Santiago, última etapa,  20 km. para disfrutar, los hice lo más lento posible.
Esta etapa no es nada bonita pero era la última y eso la hacía muy especial.
Sobre las 11 ya estábamos en Santiago, abrazos, alegría, llamadas de teléfono, y a esperar la Misa del Peregrino a las 12 de la mañana.
Yo no me emocioné por mi llegada, pero si lo hacía por los demás, compartí la alegría de todos.
Ha sido una de las misas más emocionantes que he vivido, previamente pasé por la Oficina del Peregrino, me dieron mi Compostela y avisaron a alguien para que en la misa me nombrasen también, "Peregrino de Las Palmas"...





El Camino en toda su extensión está lleno de huellas y a todos los que lo hacemos el Camino nos deja su huella.
Decía Juan Carlos, que es un señor muy típico de Santiago, vestido de peregrino medieval, que El Camino nos hace a nosotros, no nosotros el camino.
Guardo sentimientos especiales allí y sé que volveré.
Hasta aquí.....








miércoles, 13 de julio de 2011

Mi Camino de Santiago (parte II)

Con los días he ido recordando más detalles, personas, curiosidades, paisajes, comidas....y también lo he echado algo de menos, dicen que cuando vuelves te da un poco de bajón, bueno yo me he quedado con ganas de más y quizás eso sea lo bueno siempre.
Por describir un poco el viaje os diré que comencé en Molinaseca, a unos 8 km de Ponferrada y terminé en La Faba, apenas a  4 km de O Cebreiro.
Este primer día comencé muy tarde y acabé de la misma manera, a las 7 de la tarde aparecí por el albergue, fueron 55 km a fuego, llegué con los pies quemados, no pude comer nada durante la etapa, aunque bebí exageradamente, hizo mucha calor.
Supongo que no tendría muy buena cara cuando llegué al albergue porque fueron varios los que se me acercaron a preguntar que tal estaba y de donde venía.
Me asignaron litera, baño, lavar y tender la ropa y a comer, ¡qué hambre!, me fuí al bar y me comí mi primer menú del peregrino, y como fué habitual en todo mi camino, plato limpio, siempre me sentaba solo pero siempre también acabé comiendo acompañado.
En esta ocasión se sentaron a mi mesa, madre e hijo, les vi camisa de una cursa barcelonesa, no pude reprimirme y les solté: ¿Corredores, verdad?
Cenamos juntos y como todos, como cada uno con su motivo, el suyo fue intentar mejorar la comunicación entre ella y su hijo adolescente, dificil misión, pero que gracias al montón de horas que pasaban juntos al día, les estaba resultando una experiencia positiva, la verdad que me pareció una idea bastante buena.
Ya de regreso al albergue, respiré el ambiente de convivencia, charlé con todos aquellos que se me acercaron cuando llegué, un ambiente en el que es muy fácil integrarse.
Esa noche no dormí demasiado bien, y en un momento dado escuché un gran vendaval, truenos y oía llover, todo esto después de un día a 39º, por la mañana estaba el cielo azul y no había rastro de agua, yo lo pregunté pero escuché a algunos más comentar ¿esta noche ha habido truenos y ha llovido?, parecía mentira.








domingo, 10 de julio de 2011

HE VUELTO


Parece que la pubalgia está casi desaparecida, todavía tengo dolores cuando hago abdominales, así que, como dice mi amigo Gerardo, “si te duele, no las hagas”.

Ayer hicimos 12 km a un ritmo de 5’10’’, acabé muy contento y con ganas de más. La verdad que iba de vuelta a casa como un niño chico de alegre, ¡ya veo evolución!.

Hoy, 16 km al mismo ritmo, y con las mismas sensaciones.

Esta vez voy a aprender de mis errores, la vez anterior que me lancé, creía estar bien y me dí una paliza que me tiró de nuevo, ahora mesura.( Espero que la imagen de SINIESTRO TOTAL II, no se haga realidad).

Y ahora si, AHORA SI, puedo pensar en la UTGC 176 km.

Voy a escribir unas premisas iniciales sobre este tipo de carreras de ultra distancia que he ido aprendiendo con el tiempo, lo hago con una doble intención, la primera, por si le sirven a alguno de vosotros, y segunda, para yo también tenerlas presente.

Una vez elegida la Ultra que queremos hacer, la debemos de colocar como un objetivo único, son carreras de mucha distancia y necesitan una preparación adecuada, si empezamos a “complicar” la preparación con otras pruebas intermedias, nos cargaremos de kilómetros de competición que no nos servirán.

Recabar toda la información posible de la ultra a realizar, por supuesto, distancia, pero muy importante es el desnivel tanto positivo como negativo al que nos enfrentaremos, tipo de terreno, donde quedan dispuestos los avituallamientos, clima y temperatura de la zona en esas fechas. Si conocéis a alguien que la haya corrido, preguntar todo lo que se os ocurra, si no, ahí están los foros.

Una vez conozcáis a que os enfrentáis, tenéis que dotaros de armas para luchar contra la distancia.
ARMA 1.- Entrenamiento físico
ARMA 2.- Entrenamiento mental
ARMA 3.- Material

ARMA 1.- Entrenamiento físico

Importantísimo, una buena preparación física te ahorrará sufrimientos.
Pero, ¿cómo se prepara una carrera de 100 km?, difícil, ¿verdad?, lo mejor contar con un entrenador, un plan de entreno personalizado mejora el rendimiento notablemente.
Para esta ocasión tengo dispuesto 5 días semanales:
Lunes 90’ suaves en llano
Martes 60’ cambios de ritmo/series largas/cuestas
Miércoles Ruta MTB
Jueves 80’ suaves con desniveles
Viernes Descanso
Sábado, tirada larga, esta conforme avanzo en la preparación, la extiendo a más kilómetros y también a más horas.
Domingo Descanso.
Añadir una o dos sesiones de gimnasio a la semana.

El objeto fundamental es aumentar tú capacidad de sufrimiento e ir conociéndote, saber cual es el punto al que podrías ir corriendo sin apenas desgaste, dónde, en qué punto tú consumo es menor pero con el motor en marcha, ¿a qué ritmo eres económico?.

ARMA 2.- Entrenamiento mental

En todas las que he hecho, he tenido múltiples cambios, eufórico, hundido en la más profunda miseria y a los 3 km otra vez eufórico, y siempre llega la típica pregunta ¿qué hago yo aquí?.
Igual que en la euforia, no debemos dejarnos llevar y elevar nuestro ritmo, con el desánimo tenemos que luchar con imágenes positivas.

Nunca pensar en la carrera como un todo, imaginarla por tramos o de avituallamiento en avituallamiento, cada uno de ellos será una meta, disfrutad con el paisaje, distraed la mente de vez en cuando.


ARMA 3.- Material

En función del terreno, de la climatología y la distancia, tendremos que elegir el material a llevar, tened en cuenta también que muchas carreras te exigen un material obligatorio.
Fundamental ir probando todo el material en las tiradas largas, copiad en la medida de las posibilidades las condiciones de la competición en los entrenos.


En próxima entradas profundizaré en cada parte, HE VUELTO.

martes, 5 de julio de 2011

Mi Camino de Santiago


Cuando me planteo hacer mi Camino de Santiago, lo hice sin esperar nada, no buscaba arreglar mi existencia con el mundo, tampoco producir un cambio radical en mi, ni experimentar la espiritualidad pura, ni nada de nada, solo quería dejarme llevar.
Mi única planificación estuvo en el material que debía de llevar y en el camino a realizar, a partir de aquí nunca supe donde iba a finalizar cada etapa.
Me había propuesto hacerlo corriendo pero tampoco esto era algo que debía ser así en toda su extensión, si deseaba disfrutar de un paisaje, hacer una foto, bañarme en una playa fluvial, mojarme en una fuente, charlar con alguien, etc… lo haría sin ningún remordimiento, de hecho, lo hice.

En cuanto a la parte física os diré que completé hasta Santiago un total de 212 km. en 5 días, las ampollas las sufrí desde el primer día, creo que se me quemaron los pies, fueron 55 km. con mucho asfalto a una temperatura de 38-39º c, los siguientes días los primeros km eran un suplicio, mis pies me dolían enormemente, después calentaba y me ponía a trotar, de esa manera me dolían menos y los km pasaban antes.
En cualquier caso esta parte física y esos dolores eran lo de menos, cuando vas conociendo las razones de cada uno por estar haciendo el Camino.

El Camino te proporciona tiempo, es curioso, pero estamos en nuestra vida de a diario, corriendo de aquí para allá, siempre vamos con el tiempo justo, tenemos medios de transporte para llegar más rápido a cada lugar, comemos en  establecimientos de comida rápida, utilizamos diferentes medios de comunicación para facilitar gestiones sin tener que desplazarnos y así tampoco perder tiempo, todo en pos de ganar tiempo para nosotros mismos.
Tiempo, tiempo, tiempo,…….Pues, es curioso que en el Camino cuanto más lento vayas más tiempo tienes para ti.

Otra lección importante, va en relación con el material que lleves en tú mochila, yo esto lo gestioné muy bien, prescinde de todo aquello que no sea realmente útil, cuanto menos carga lleves más fácil serán tus desplazamientos.
En la vida nos rodeamos de tanta carga  inútil que muchas veces lo más importante lo olvidamos y atrevernos a realizar cualquier cambio en nuestras vidas es poco menos que imposible.

El espíritu de sacrificio, la voluntad de completar cada etapa, el sueño de llegar a Santiago y asistir a la  Misa del Peregrino está presente en cada persona que camina al lado tuyo.

Yo quizás por mis entrenos y competiciones completadas de larga distancia, la llegada a Santiago no me emocionó en este sentido, no digo que me resultara fácil, las ampollas me lo pusieron muy difícil pero está claro que no hay nada que te haga parar si estás decidido.
Mi emoción vino al escuchar la Misa, no soy de los que suelen asistir a misas, pero esta me llegó al alma. Ver abrazados a tantos peregrinos en la Plaza de Obradoiro, y sobre todo cuando vi a Mari Carmen, una donostiarra de 64 años, completando su camino desde Roncesvalles y una historia que la hace muy, muy grande; y su compañera, la que encontró en su camino, una chica de cuarenta y tantos, alicantina, deportista como nosotros, corredora, ciclista, nadadora, con una historia que me llevó por delante y que con su Compostelana se puede ir a ese gabinete de médicos, y enseñarles con una pierna reimplantada, con una esperanza de movilidad de su rodilla de un 1%, se hizo más de 300 km. a pie.
Son y serán mi ejemplo de superación cada vez que me encuentre bajo de moral.

Tengo mucho que contaros, poco a poco, todavía estoy asimilando.