lunes, 31 de octubre de 2011

FUDENAS experience


Llevaba dos años escuchando las distintas experiencias y anécdotas, así como la excelente organización y ambiente que se respiraba en “Fuerteventura de Norte a Sur” FUDENAS, así que este año decidí no dejarlo pasar y así mantener cierta actividad después de la UTGC, previendo que iba a estar muy cansado y que sería bueno articularmente cambiar a un deporte donde no hubiera impacto.
Así que el viernes a las 7 de la mañana partimos en el barco rumbo a Morro Jable desde Las Palmas de Gran Canaria cientos de ciclistas.
La logística en una prueba de estas es impresionante y a pesar de que hay cosas que se pueden mejorar creo que es de honor dar las gracias a la organización por el esfuerzo que realizan durante los tres días que dura el evento y por supuesto por todo el trabajo anterior de preparación de una actividad donde se rozó los 1400 participantes.
En el barco ya se respiraba el ambiente festivo de la prueba y el espíritu de convivencia que ibamos a vivir durante 72 horas.
Una vez llegamos a Morro Jable nos estaban esperando varios autocares (guaguas) y un sinfín de furgonetas para cargar las bicis, ellas fueron llevadas directamente a la salida de la carrera y a nosotros en primera instancia nos llevaron al acuartelamiento del Soria 9 donde nos entregaron, los dorsales, identificación de maletas, normas y una cartulina para el control de las comidas.
Todos en fila en el patio del cuartel me recordó cuando hace años llegué a uno, nos pusieron en fila también, nos entregaron la ropa y seguidamente nos pelaron al uno.
En la cantina nos echamos una cervecita con un bocata en tanto en cuanto llegara la hora de partir a Corralejo, por cierto el autocar nuestro se movía más que el barco, todos se pusieron a cantar “duérmete niño, duérmete ya”, las risas que no falten.
Una vez en Corralejo, fuimos a comprobar las instalaciones donde partiría la carrera y revisar las bicis, todo correcto pues a descansar.
Yo para esta ocasión no estaba nervioso, pero si tenía dudas en cuanto a como respondería físicamente ante una prueba de este tipo, jamás he hecho tantos kilómetros encima de una bici y menos de montaña, ahora ya lo sé.
A las 8:45 h llegué a la salida con un buen desayuno encima, y en el pantalón guardado un par de geles para la ruta.
A las 9:30 h partió la modalidad CARRERA de FUDENAS, 150 km en una etapa, yo me apunté a la RUTA, es el mismo recorrido pero en dos etapas 60 y 90 km.
Ver la salida es espectacular, un desfile interminable de bicis, cuando estás dentro extremas el cuidado en no tocar a nadie, en no hacer cambios bruscos de dirección y avisar siempre, el peligro es evidente, una caida en medio de un pelotón así puede causar un desastre.
En los primeros kilómetros el recorrido fue por pistas de tierra muy bacheadas, hecho que produjo que se cayeran muchos bidones de agua de las bicis e incluso bimbas (fuelles o infladores), mi bidón cayó en la primera bajada que hubo por lo que tuve que parar y regresar corriendo a por él, con mucho cuidado lo recogí porque era una bajada muy prolongada y cómoda donde se cogía alta velocidad, de esas que gustan sintiendo el aire en la cara.
El sábado amaneció con nubes en el norte, lo cual hizo más llevaderos los primeros kilómetros, después el sol hizo su aparición.
Los kilómetros fueron cayendo, 10, 20, 30…la verdad que acostumbrado a como me pasan en las carreras, estos se me fueron enseguida y con 2 h 50’ cubrí los 60 km de la primera etapa, consumí un gel y el bote de 750 ml de agua un poco más de la mitad, o sea gasto mínimo y sin ningún tipo de desgaste.
Esta primera etapa culminaba en el Polideportivo del pueblo de Antigua, allí habían montado una gran carpa para las comidas de los casi 700 que nos quedamos allí.



Ahí almorzamos, cenamos y desayunamos y en la cancha del pabellón anexo pusimos nuestros sacos de dormir para pasar la noche.
El ambiente de camaradería y compañerismo está muy latente, el hecho de convivir tantas horas juntos hace que conozcas a muchos de ellos y compartas momentos como los que viví en la cancha de fútbol con los compañeros de Nauzet y Fran, acompañadas por unas bebidas enlatadas que vendían en la cantina.
O los miembros del equipo Mucha Vida que no tenía el gusto de conocer personalmente a pesar de yo llevar la misma camiseta, conociéndolos ahora la llevo con plena identificación, aunque su Presidente Pablo me tiene que explicar la filosofía del club que no me quedó muy clara después de la explicación de Pepe.


Tanto en el almuerzo como en la cena no dejé titere con cabeza, me lo comí todo, y en medio también visité una boutique del pan donde acompañando al café me zampé el dulce más grande que tenían, si, lo pedí por el tamaño, así que como os decía el desgaste en la carrera fue mínimo pero una vez me paré no dejé de engullir y beber agua y un líquido amarillo con espuma en la parte de arriba (1 cm es lo ideal).

La noche compartida con 699 en el mismo local puede ser maravillosa, todos sabéis que puede suceder, entre cuchicheos, risas , ronquidos y otros ruidos, Creo que todos dormimos por tramos, yo a las 4 y cuarto me levanté pensando que ya era la hora de levantarse por el jolgorio que había, nada quedaban todavía cuatro  horas más, así que me enterré en el interior del saco hasta que sonó la corneta con el “quinto levanta tira de la manta…”
Una vez levantados y antes de desayunar una banda militar nos tocó varias marchas militares, son detalles que hacen especial también esta carrera.

A las 9 de la mañana se daba la salida a la segunda etapa de 90 km siendo los últimos 30 matadores por el perfil y los distintos terrenos que tocaba, zonas técnicas, rocosas, bajadas con final en zonas arenosas o pedregosas donde se hundían las ruedas, playa, y bunkers de arena donde era mejor portar la bici al hombro.
Además de la dificultad del perfil encontramos zonas de viento en contra y mucho más calor que el día anterior.
En cuanto a comida me tomé un gel y un plátano, y de bebida aparte del agua si consumí dos acuarios de medio litro, con eso solo tuve un amago de tirón en el isquio izquierdo al finalizar una subida durilla.

Los últimos kilómetros fueron por asfalto con subidas y bajadas con viento en contra, ahí ya iba deseando llegar, el paseo por la playa estaba acompañado de mucha gente dando ánimos y que hacía que metieras plato grande y piñón pequeño dando el último esfuerzo, por cierto cambiar el plato me costó un mundo, mi dedo gordo no tenía fuerza y con las dos manos en el puño izquierdo del manillar logré cambiar el plato, jajajaja…nunca me había pasado esto.

5 h 5 minutos me costó esta segunda etapa, tremendamente contento del resultado, no está nada mal, diploma, mochila, saquito de sal de Fuerteventura, un boli y un maillot de finisher de la FUDENAS y la satisfacción de haber formado parte de esta fiesta del deporte.

Una vez acabamos, ducha y postcarrera sentados en una terracita a pie de playa ingiriendo líquidos de esos con espuma y bocatas reponedores, tertulia y risas, muchas risas por la satisfacción de cada uno.

Después, un par de kilómetros cargados con la mochila y pedaleando hacia el puerto para coger el barco de regreso, allí continuó la fiesta.

Mis sensaciones hoy después de haber pasado todo, es que físicamente no hay nada reseñable y mentalmente que el próximo año quiero ser de los de la partida también, mi única pena ha sido olvidarme la cámara de fotos.

Merece la pena vivirlo.

jueves, 27 de octubre de 2011

¡¡¡ A pedalear !!!

Este fin de semana seré uno de los 1400 bikers que atravesarán la isla de Fuerteventura de norte a sur, 150 km., lo haré en la modalidad de ruta, esta modalidad reparte el recorrido en dos etapas, la de carrera lo hace en solo una; la prueba está organizada por el ejército y esta es su 5ª edición, su nombre  FUDENAS

Así que como estamos de descanso, al menos psicológico porque lo que es físico, ni lo he hecho ni se me apetece, decidí hace ya bastante tiempo que una prueba en plan excursión pedaleando no estaría de más después del machaque articular de una ultra, y lo que son las cosas, ahora me encuentro corriendo todos los días de 10 a 12 km pero a ritmo alto de pulsaciones, no me vale quizás para nada, pero es que las piernas me lo piden y yo me divierto de lo lindo. Tanto es así que esta semana quería seguir acostumbrando el culo a pasar varias horas encima del sillín de la bici y me han podido cada día más las ganas de correr, así que el lunes ya os diré como lo tengo después de 150 km y varias horas. 

Ya tengo decidido que voy a ir preparando a partir de mediados de noviembre, os pediré consejo.

Justo al principio de esta preparación haré una de montaña, aunque en su versión corta T3 21 km. , el año pasado la dejé pasar, este,¡¡¡ nooooo!!!

Ahora toca DAR PEDALES





domingo, 23 de octubre de 2011

Epilogo y puertos

Bueno para finiquitar la UTGC 2011 y para mí sus 112 km., he estado valorando y analizando mi carrera, queda claro que la máquina falló, pero...¿por qué?.
Así que me he propuesto un par de soluciones por si surge otra aventura de estas, una de las cosas que voy a hacer es planificar sobre el papel, no solo la carrera y sus tiempos de paso, que eso ya lo hago sino también la alimentación que voy a llevar, si consigo hacer esto va a ser fácil incluso cargar la mochila, indicar por ejemplo km. 20, 2 h 15', bolsita 1 "Almendra molida con miel", de esta forma está todo controlado en cuanto a la ingestión de un nº determinado de calorias y nutrientes necesarios (hidratos, fructosa, minerales, etc...) y además me obliga a comerlo porque es lo que está dispuesto para ese momento.
Uno de mis errores fué precisamente este, que demoré tanto la comida, porque no se me apetecía que cuando quise ya era demasiado tarde.
Otro elemento es portar mis sales en todo momento, tomar las que te ponen en los avituallamientos, al margen de la calidad de las mismas, está, en que grado está bien hecha la disolución, ¿han puesto las medidas correctas, o no?. Siempre decimos "no debemos probar nada nuevo el día de la carrera", esto por ejemplo lo hice, y me afectó tremendamente.
Por lo que estoy diciendo, los avituallamientos sobrarían en parte, serían sólo estrictamente necesarios para suministrarnos agua, estaríamos corriendo prácticamente en autosuficiencia, cosa que da más valor si cabe.
Creo que estas pueden ser buenas soluciones, las escribo para no olvidarlas y ponerlas en uso en los entrenos.
Por último, ha sido un gustazo tener a Carles Aguilar por aquí, conocer a Pancho y ver de nuevo a Gonzalo y Manolo Robaina, compartimos tantas cosas sin vernos, solo leyéndonos, que cuando nos vemos (aunque solo haya estado unos minutos) ¡ya es la leche!.

Y para terminar mi semana ha quedado así:

Lunes          Natación, poquito porque había mucho oleaje, 30'
Martes        Bicicleta montaña 20 km con desniveles
Miércoles    Carrera contínua con desniveles ritmo suave 12km.
Jueves        Bicicleta montaña 20 km en terreno llano
Viernes       Descanso
Sábado       Carrera contínua con desniveles ritmo suave 12km.
Domingo     Bicicleta 45 km en terreno llano  

Físicamente he quedado bastante bien después de la ultra, así que por lo menos tengo esa alegría.

Esta mañana rodaba esos kilómetros en bici por el litoral de la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria, la mañana estaba preciosa, cielo totalmente despejado, el mar hecho un plato, sin olas, solo ondas, parecía verdaderamente que se podía alcanzar cualquier barco caminando por el agua, ¡una maravilla!
El pensamiento se me iba a mil cosas mientras escuchaba la música del mp3, pedaleaba, respiraba hondo y veía la cantidad de barcos apostados en el agua esperando a entrar a puerto.
Y reflexionando me dije, eso mismo somos nosotros, puertos, cada uno de nosotros somos puertos receptores y emisores de miles de barcos a lo largo de nuestras vidas.
Barcos que vienen y dejan parte o toda su carga en nosotros, y nosotros mismos los cargamos con otras mercancías para que sean llevadas a otros lugares, a otras personas.
Cada persona que nos rodea, que se acerca a nosotros nos puede traer cosas buenas, nos puede enseñar, nos puede abrir los ojos. Otros no nos traen nada que nos sirva, pero quizás nosotros si les aportemos. Y en esa estamos que en este mundo de las comunicaciones seamos capaces de ver que cada uno de nosotros puede aportar mucho y seamos verdaderamente capaces de aprovechar todos los medios que tenemos a nuestro alcance en pos de mejorar, en principio  nosotros mismos y como consecuencia el mundo en general. Los telediarios me tienen quemado.

Semana que viene estamos en FUDENAS. http://www.soria9.es/prueba.html







miércoles, 19 de octubre de 2011

Sueños rotos

Llegando al km. 16 Fataga


Pocas veces antes he sentido tanta seguridad en mi mismo y he mostrado tanta confianza no solo en conseguir acabar una prueba de este tipo, si no también en alcanzar un buen puesto.

Cuando hablamos de una Ultra, nunca se sabe, son demasiados kilómetros, muchas horas y una gran cantidad de variables (factores externos e internos) que pueden afectar nuestra carrera.
Yo había dicho en un post anterior “Prima de riesgo” que la misma era prácticamente cero, pero también dije en “I Have a dream” que buscar los límites tiene sus riesgos, como digo, plena seguridad en mí, basada en el entreno que había llevado, en las distintas pruebas de alimentación, pruebas de ropa, etc…

El inicio de la carrera vino a confirmar mi estado, al poco de una subida vertical de 500 m de desnivel en apenas 1 km. de distancia, el primer kilómetro de la prueba de los 176 a cubrir, ya empezamos a destacar situándonos a la cabeza de la prueba, las piernas iban muy ligeras, con una sensación de mucha agilidad, tanto en subida como en bajada.
El único “pero” era mi estómago que tenía un ligero dolor y pesadez, pero nada de importancia (en principio).

Tanto era el ritmo que, Gilberto Molina, ganador final de la prueba, me comentó que habíamos pasado por el km. 16 con 40’ de adelanto sobre el tiempo que tenía previsto, ¡una locura!, imaginad en maratón cuando corres 5’’ menos por kilómetro de lo que tenías previsto que te puede ocurrir a partir del 30.

En la cabeza estuvimos hasta aproximadamente el kilómetro 25, donde me dejé ir, buscando acomodo a mi ritmo, situándonos a partir de ese momento y hasta mi final en la tercera plaza de la general y primera por equipos.

A partir de este kilómetro, tanto Andrea como yo, competiamos en la categoría por equipo, decidimos un ritmo constante pero asumible, las sensaciones seguían siendo buenas.

Sobre el kilómetro 40 vimos amanecer, “Presa de Chira”, se nos unieron dos corredores más que competían en la categoría individual, a la postre fueron 2º y 3º en la general.
Por cierto ver amanecer en la montaña es una gozada, en este tipo de carreras es fundamental, disfrutar de todo lo que te rodea, de su belleza, olores, sonidos…..de todo ello disfrutas mientras vas bien y mentalmente te ayuda a relajarte.

La unión con estos corredores duró unos 10 km. donde los volvimos a separar y no los volvimos a ver hasta el km. 88, poco a poco el sol empezó a calentar, más aún en la zona sur de la isla donde nos encontrábamos, cuando llegamos al km. 67, Mogán, llevábamos 13 h. y el sol ya era de justicia.

Km. 67 Mogán

A todo esto, solo había conseguido comer una rebanada de pan de centeno con miel y unas rodajas de longaniza de pavo, un trozo de plátano, una cerveza y mucho líquido en forma de agua y sales.
Mi problema empezaba a asomar, aunque en ese momento y debido a lo bien que me encontraba, no le presté tanta importancia, no es normal llevar 67 km. con tan poco en el estómago.

A partir de este punto y durante los siguientes 20 km., el calor nos hizo sufrir, es una zona donde no hay vegetación y justo cogimos las horas más fuertes entre la 13 y las 16h. andamos por el desierto, de ahí a La Aldea, donde se situaba el avituallamiento central, km.88, en este punto tenía una ampolla molesta que me curaron y lo que más me preocupaba, los isquios y gemelos daban amagos de contraerse, un baño en una piscina con hielo y un estiramiento en camilla lo solucionaron.




Aquí solo pude comer medio plato de arroz blanco, ese fue el principio del fin, aún así salí con mucha fuerza y ganas, camino del siguiente punto de control, Artenara km. 108.

De La Aldea a Artenara, “solo” hay 20 km., pero qué kilómetros, si estos pueden tener valor doble, yo se los daba, constante subida, en principio muy técnica para después ir convirtiéndose en un sendero de tierra con algunas zonas rocosas. En esta subida se nos hizo de noche, la 2ª noche en vela, hubo un momento en que empecé a tener sudores frios, a sentir hambre y tener mucho sueño.
No paraba de comentarle a mi compañero que quería comer pero que sobretodo cuando llegara a Artenara iba a echarme a dormir 15 minutos, lamentablemente no pude aguantar las ganas y en una de las rampas me tiré, quedándome dormido en segundos o perdiendo el sentido, no lo tengo claro todavía, lo cierto que Andrea se asustó, intenté comer pero empecé a vomitar, una y otra vez, solo líquido, mi cuerpo no había asimilado nada de lo que había tomado, estaba deshidratado.

Sacando fuerzas de donde no se sabe, mantuvimos un buen ritmo y conseguimos llegar a Artenara, aquí intentaron paliar mi deshidratación por distintos medios, pero todo lo vomitaba, finalmente me inyectaron suero en vena y primperan para cortar los vómitos.

Tenía las pupilas dilatadas, ojos amarillos, piel reseca, lengua agrietada y un dolor de ojos importante.

Tres horas estuvimos parados en este avituallamiento, me las pasé durmiendo, cuando desperté me comí un bollo de leche y un paquete de patatas fritas a la vinagreta, me comentaron que eramos todavía primeros por equipos y le dije a mi compañero ¡vámonos! ¡a por la meta!.

Así que nos fuimos, otra vez en carrera, ¡qué felicidad!, pero….todo fue un espejismo, me dí cuenta al poco de comenzar que no podía beber el agua que llevaba en el camel porque me sabía a las sales, esto me volvió a hacer vomitar, ante esto decidí vaciar mi camel y al menos llevar dos kilos menos encima, pero claro continuar con solo  un bote de medio litro de agua y sin poder asimilar ni líquido ni sólido era un tanto arriesgado.

Si ni comes ni bebes, estás muerto.

En el kilómetro 112, con 13100 metros de desnivel acumulado decidimos abandonar, era muy complicado completar los 64 km que quedaban en estas circunstancias, sé que hice bien, pero aún así sigo preguntándome ¿qué hubiera sucedido si llego a seguir?, nada bueno posiblemente.
Momentos de felicidad para el recuerdo


Finalmente, perdí un reto, que tenía en la mano, y 6 kilos.
Si me dijeran que mañana se vuelve a repetir la carrera, la haría sin dudar, quiero quitarme este amargor cuanto antes. Pero si me dicen de correrla para el próximo año, en este momento, ya digo que ni loco.

Agradecer desde aquí de una forma muy especial  a toda la gente que estuvo pendiente de mi en Artenara, Dario Dorta, el personal sanitario y los voluntarios de la carrera, entre ellos Gloria, ¡GRACIAS!

Tal estado quedé que dos días después apenas había comido y tuve que acudir a Urgencias para que me rehidrataran vía vena con dos botes más de suero.

Ya he recuperado 4 kilos, ayer salí a hacer 20 km en bici de montaña y hoy voy a correr 12 kms, estoy con ganas.

jueves, 13 de octubre de 2011

"I have a dream"



Un día empecé a correr………hoy todavía sigo haciéndolo con la misma ilusión, pero como en todo, para mantener la llama viva hay que alimentarla en forma de retos, de nuevas aventuras.

Hoy veré cumplido mi último reto, ya es importante situarme en la línea de salida sin haber sufrido ningún percance después de tantos kilómetros de entreno, ahora toca disfrutar del camino y conseguir llegar a la meta.

Pocas cosas son comparables a ver realizado tú sueño, ese momento, el momento que cruzas la línea que marca la llegada, provoca en nuestro interior tal volumen de sentimientos que nos inunda de emociones, emociones que son imposibles de expresar, no existen las palabras justas que contengan todo lo que guardamos en nuestro interior y que mostramos de diversas maneras en ese justo momento que cruzamos la línea.

Puede parecer y de hecho yo creo que lo es, una ultra trail es mucho más que una carrera, mucho más que una prueba de resistencia, tiene que ver mucho con los valores, el deporte en sí inculca valores, pero en este extremo te los graba a fuego; el compañerismo, la valentía, la constancia, el tesón, ………

Buscar los límites tiene sus riesgos pero caminar en ese límite te ayuda a conocerte mejor.

La fiesta va a comenzar…..me voy a cumplir mi sueño.

domingo, 9 de octubre de 2011

Última estación

Me comen los nervios, bueno más que nervios es inquietud. He intentado hacerlo lo mejor posible, entre días malos y buenos hemos conseguido ir sumando kilómetros, desniveles y muchas horas de entreno.
Estoy mentalizado para sufrir, aunque todos sabemos que cuando llegan las crisis es cuando de verdad sabemos si nos hemos preparado bien para ellas, que lleguen es normal, entre tantos kilómetros, lo importante es saber gestionarlas y salir de ellas con el menor daño posible; las pájaras son verdaderos pozos negros donde el límite ha sido superado y el cuerpo se ve desbordado de necesidades que cubrir.
En la mochila llevaremos todo el material que señalan como obligatorio pero también todo aquello que hemos aprendido mediante los entrenos que pueden ser herramientas útiles para cubrir esas necesidades.
Que gastamos muchas energía.....almendras con miel, croisan con nocilla, membrillo..
Que gastamos muchas sales....flectomin, recuperation,....
Que gastamos vitaminas, magnesio, potasio.....plátano, complemento vitamínico, magnotene, geles....
Hay que mantener la despensa interior bien surtida.
También me he añadido en la mochila cierta presión, para cumplir el reto, me he comprometido con compañeros a hacer una buena carrera, sobre todo con mi pareja de carrera, Andrea, vamos a darlo todo, él por mi y yo por él, debemos ser el uno para el otro el sustento en las debilidades.
"1+1 es mucho más que dos"

Todas, todas....son herramientas para asegurar la carrera al máximo, aunque como decía en "Prima de riesgo", este lo tengo minimizado, no por ello me libro de esta inquietud.
Mañana o pasado mañana iremos a recoger el dorsal, momento mítico también,  tenerlo en tu mano, ver el nº con tu nombre, uffff....lo estoy escribiendo y me estoy metiendo en el papel, noto la tensión. 
En esta semana también nos dan la camiseta con la que vamos a correr, y la que llevaremos en meta, cuando todo haya acabado.

En esta última semana los entrenos han estado así:


Lunes         Descanso
Martes        Rodaje 12 km con desniveles, ritmo alegre 
Miércoles   Rodaje 16 km 
Jueves        Rodaje 15 km, con mucha subida, cambios de ritmo en subidas poniendo las 
                  pulsaciones casi al límite mio, 163 ppm
Viernes       Descanso
Sábado       20 km. en montaña, con elevado desnivel tanto de subida como de bajada.
Domingo    Natación en la Playa de las Canteras y estiramientos.

Mañana rodaré unos kilómetros, una horita, 12 km y el martes, masaje de descarga.
El miércoles descansaré lo más que pueda aprovechando que es día de fiesta y el jueves a las 12 de la noche, comenzará la aventura.

A todos, ¡¡¡GRACIAS!!!, por los apoyos recibidos, ánimos y fuerza que me habéis mandado, todo lo he cargado también en mi mochila, os llevaré conmigo.     

domingo, 2 de octubre de 2011

Prima de riesgo

Bien podría ser el perfil de una carrera de montaña

Los mercados andan revueltos, con constantes movimientos, apenas un rumor y la bolsa se desploma, apenas unas declaraciones de cualquier iluminado y otro derrumbe; así andamos.
No soy ningún experto en este mundillo, pero si he conseguido algo, que ya quisiera el gobierno haberlo logrado.
He conseguido en apenas dos meses disminuir mi prima de riesgo a casi cero, o sea, la he dejado al mismo nivel que la potencia considerada más segura.
Esto me ha costado mucho trabajo, he hecho disminuir la sensación de ser débil ante cualquier rumor (los rumores son esas voces internas que te dicen normalmente cosas negativas), me he hecho fuerte y genero confianza en todos aquellos que me rodean, pero sobretodo en mí. 
No hay montaña, ni pendiente, ni desnivel que no sea capaz de subir, si la han puesto en medio del camino hay que subirla y bajarla también (espero acordarme de todo esto cuando esté hasta los hue... de montaña).
Un mero rumor no me tumbará, llevo muchos kms en las piernas, y por muy revueltos que están los mercados, yo a lo mio.





Lunes           Descanso
Martes         Rodaje 20' a 5' km y un poco de ritmo altos (1600 m a 3' 40'' km, 800 a        
                  3'20'' km y un 2000 a 4' km) + 10' a 5' km + Gimnasio (piernas y estiramientos) 
Miércoles     Gimnasio (tren superior) + 18 km montaña (Subida Pico Osorio desde Arucas)
Jueves        Gimnasio (abdominales, lumbares y estiramientos)
Viernes       Rodaje 20' a 5' km + 8x400 a ritmos entre 3'00'' y 3'05'' km + 10' a 5' km
Sábado       Descanso
Domingo     37 km en montaña (esta si que ha sido la última tirada larga previa a la UTGC) 


Lo de la series de 400 m, es una frivolidad, no es nada necesario para una ultra, pero de vez en cuando me gusta apretar las tuercas y sentirme rápido, digamos que fué un pequeño capricho.