Queridos reyes magos:
Este año no os diré que me he portado bien, tengo una sensación agridulce.
Comencé el año corriendo el Trail Blanche, 50 Km en alta montaña y con nieve, mucha nieve, de hecho redujeron 15 km. el recorrido por temor a que se produjeran aludes, las sensaciones fueron buenas, la clasificación no tanto, la compañía excelente.
A las tres semanas tocó la Maratón de Sevilla, quise hacerla junto a mi hermano y la hice hasta que abandonó, mi tiempo fue discreto 3 h 57’’, pero en este caso el tiempo era lo de menos, me fui sobrado aunque suene un tanto presuntuoso y muy feliz de haber compartido esos 15 km. junto a él, hacía mucho tiempo que no pasaba casi 2 horas junto a mi hermano a solas, charlando mientras corriamos, llevo 16 años en Las Palmas y él vive en Sevilla.
A partir de aquí comencé a entrenar en serio para mi segunda participación en la ultra de montaña de La Palma, la Transvulcania, 83 km. con un desnivel acumulado en torno a los 8500 m., mi preparación fue excelente, casi tres meses de mucho sacrificio y kilómetros de montaña, soprendentemente y por motivos casi inexplicables cuando finalicé la subida en el km. 60, en el Roque de los Muchachos, decidí que tenía hambre y sueño y que a pesar de ir situado entre los 50 primeros, lo que yo quería era comer y dormir y desde luego no correr.
Ese mismo día no, ni siquiera al día siguiente, no era consciente todavía, nunca me he arrepentido tanto de una decisión tomada en carrera, lo pasé mal, me machaqué muchísimo por aquello, cada día que pasaba más…..dicen que lo importante es saber levantarte y aprender, esto me hizo mucho más fuerte mentalmente.
Un par de meses después sentía las ganas de ilusionarme de nuevo con algún reto, desde Junio, no corría con algún sentido, el entreno no era especifico para nada, y ahí se presentó la oportunidad una prueba experimental, con una participación cerrada a corredores con cierto nivel, la Ultra Trail Gran Challenge 175 km.
¡Dios! era lo que necesitaba algo fuerte, extremadamente fuerte, que me motivó extraordinariamente, la preparé específicamente en solo 50 días, el resto de kilómetros ya los tenía mi cuerpo, el 22 octubre cuando se dio la salida a la carrera, solo tenía una visión, la meta.
Lamentablemente, en el kilómetro 131, la prueba se vino abajo por un fallo organizativo y un cambio climatológico importante.
Lo mejor que aprendí muchísimo más de mi y de trabajar en equipo(la prueba fue por parejas), que soy desde La Palma no solo fuerte fisicamente si no también mentalmente, y que desde luego cada vez estoy más enamorado de este deporte.
Y acabé el año corriendo la San Silvestre y llegando a meta, por fin….jajajaja….
Así que queridos reyes magos, quiero que mis regalos lleguen en forma de retos y tener la satisfacción de ir cumpliéndolos uno a uno.
Para todos vosotros deseo lo mismo y que algunos de ellos tengamos la alegría de compartirlo juntos.
Hola Juanma, soy Melchor: lamento decirte que en la carrera de fondo / montaña no podemos satisfacer tus deseos. Sólo hay una forma de conseguir lo que quieres y eso ya lo tienes dentro de tí: sacrificio, lucha y superación. Si quieres te traemos unas zapatillas nuevas, sólo tienes que decirlo.
ResponderEliminarDeseo que tus reyes majos te permitan cruzar las metas, y a ser posible que los mios tambien.
ResponderEliminarSaludos..!! He leído tu resumen y espero que este recién iniciado 2011 te traiga esos retos importantes que estás pidiendo.. Pero no lo olvides... Sera duro...!!
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